10 futbolistas que se pasaron al cine

Seguimos inmersos en este Mundial que tantas emociones está deparando. Una competición muy igualada que en unos días comienza su segunda fase: las eliminatorias que ejercerán de camino hacia la final. ¿Qué equipos la jugarán? ¿Cuáles serán los jugadores que decidan el cuadro de honor de este Mundial? Seguro que se les pasa por la cabeza un buen puñado de protagonistas. El cine siempre ha intentado aprovechar el tirón de estos gladiadores del siglo XX para captar la atención del público. Numerosos jugadores han probado con mayor o menor fortuna en el séptimo arte. Algunos pasaron de puntillas; otros, en cambio, se quedaron para siempre. A continuación, elegimos 10 futbolistas que dejaron por un momento el terreno de juego y se pasaron al set de rodaje.

(Photo by R?hnert/ullstein bild via Getty Images)
Edson Arantes do Nascimento, Pelé, en La gran evasión (1963)

Ya hablamos de él hace un par de semanas en el artículo sobre Las mejores películas sobre fútbol de la historia. Para muchos, Pelé es el mejor jugador de todos los tiempos, tanto, que pudo ayudar a salvar a los prisioneros de un campo de concentración alemán en la inolvidable cinta de John Huston.

Éric Cantona, en Buscando a Éric (2009)

Igual de virtuoso que de temperamental. Delantero francés del Manchester United de Alex Ferguson de los noventa y miembro de una de las grandes generaciones del fútbol galo –formaba pareja de ataque con Jean-Pierre Papin— que fracasó en su intento de clasificarse para el Mundial de Estados Unidos en 1994. Tras el final de su carrera se pasó a la actuación, participando en películas como Elizabeth o La fortuna de vivir en sus comienzos. Fue Ken Loach quien le dio el papel de su vida con Buscando a Éric, una de las sensaciones del Festival de Cannes de su año. Cantona sigue alternando la ficción con labores humanitarias.

Vinnie Jones, en Lock & Stock (1998)

Otro tipo rudo. Aunque, a diferencia del astro francés, bastante poco dotado con el balón en los pies. Se hizo un nombre como central del Wimbledon, donde coleccionó agresiones y expulsiones. Un personaje que aprovechó Guy Ritchie en su cinta debut, con la que comenzó una dilatada trayectoria en el cine.

Alfredo Di Stefano en Con los mismos colores (1949)

La Saeta Rubia completó una carrera cinematográfica paralela con pequeñas intervenciones y cameos en films argentinos y españoles. Uno de sus roles más recordados fue su participación en Con los mismos colores, de Carlos Torres, una historia de superación y gloria.

Ladislao Kubala, en Los ases buscan la paz (1954)

Al igual que su contemporáneo hispano-argentino, el jugador húngaro del F.C. Barcelona, sumó varios proyectos delante de la cámara. El más recordado es esta ficción, dirigida por Arturo Ruiz Castilla, que retrata su propia vida.

Zinedine Zidane, en Astérix aux Jeux Olympiques (2008)

Y qué decir del gran futbolista de la Juventus y del Real Madrid, con el que ganó también como entrenador tres Ligas de Campeones. Durante su carrera como futbolista hizo un pequeño cameo como faraón egipcio en esta película de Astérix que además era un as del balompié.

Arthur Antunes Coimbra, Zico, en Una aventura de Zico (1998)

Uno de los grandes futbolistas brasileños de la historia que también disputó un Mundial como entrenador de Japón. Tras el final de su carrera como jugador interpretó esta película infantil que fue un éxito en su país natal.

Diego Armando Maradona, en ¡Qué linda es mi familia! (1980)

Otro de los gigantes que se interpretó a sí mismo en un buen número de películas y documentales. El por entonces jugador de Argentinos Junios participó en esta popular comedia dirigida por Palito Ortega. Más tarde pasaría a Boca, al F.C. Barcelona, al Nápoles y conocería la gloria y el fracaso.

George Best, en Percy (1971)

Un maravilloso jugador con una vida personal agitada debido a la adicción al alcohol. Miembro de una de las grandes generaciones del fútbol británico integrante de un inolvidable Manchester United. Best hizo un pequeño cameo en Percy, una comedia que tiene como leitmotiv un implante de pene.

David Beckham, en Rey Arturo: La leyenda de Excálibur (2017)

Es probablemente el mejor ejemplo de marketing futbolístico. David Beckham, el número siete del Manchester United y posterior jugador del Real Madrid, era un futbolista tan elegante en el césped como atractivo para las marcas fuera de él. Ha intentado en numerosas ocasiones pasarse al cine sin demasiada suerte. Guy Ritchie le invitó a un cameo en su infravalorada última película. No será la última vez que veamos a Beckham en la pantalla grande.

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