Durante este mes, Sundance TV ha programado la cinta canadiense Sleeping Giant, que, tras su puesta de largo en el Festival de Cannes en 2015, pasó bastante desapercibida en el circuito comercial. Es parte de la esencia del cine independiente norteamericano, sus propuestas no están hechas para todos los públicos; una circunstancia que, cómo no, penaliza su distribución internacional. A continuación, les sugerimos cuatro películas a rescatar. Ninguna se estrenó en España y su paso por la geografía estadounidense fue testimonial.
1. Old Joy, de Kelly Reichardt
Es la gran directora del momento e inspiración y blasón del cine indie estadounidense. Old Joy, la historia de una amistad que será puesta a prueba en un viaje a Oregon, es su segunda película. Con ella, obtuvo el beneplácito de la crítica y el máximo galardón en el Festival de Róterdam, el HIVOS Tiger Award. Es el pilar de una carrera muy interesante que nos ha dejado maravillas como Wendy y Lucy o Certain Women. Su ópera prima, River of Grass ha sido restaurada y exhibida en el MoMA el pasado año. Cualquiera de las cintas de su filmografía es una joya a revisionar.
2. …Y entonces fuimos felices, de Daniel Patrick Carbone
«Dos hermanos se ven obligados a madurar tras la muerte de un amigo. El suceso conmociona la vida aparentemente tranquila de la localidad en la que viven, y desestabiliza a los hermanos y a sus amigos de un modo que no son capaces de concebir». Esta es la sinopsis del debut de Daniel Patrick Carbone, director de fotografía y productor de numerosas obras de bajo presupuesto, que sedujo a la prensa tras su paso por la Berlinale y el Festival de Tribeca en 2013. Un coming-of-age que se adentra en el pantanoso terreno de la aceptación de la muerte desde un punto de vista adolescente.
3. Songs My Brothers Taught Me, de Chloé Zhao
A la realizadora de origen chino ya la han visto en este blog más de una vez a propósito de su segunda película, The Rider, que se estrenará en España gracias a Caramel Films. Songs my brothers taught me fue su cinta debut, un drama sobre la realidad en las reservas indias estadounidenses que expira una lírica conmovedora. Pese a que diferentes festivales la auparon como lo mejor de 2015, apenas llamó la atención entre el público.
4. James White, de Josh Mond
Aun sin los números de su lado, hablamos de una de las grandes películas de 2015. Su recorrido tras ganar el Premio del Público de la sección NEXT de Sundance fue exiguo. Tampoco ayudó demasiado su concurso en Locarno. Sin embargo, los Spirit Awards lograron aupar a este filme que narra la historia de redención de un hijo que debe asumir el cuidado de una madre con un cáncer terminal. Christopher Abbott y Cynthia Nixon están sensacionales.
Park City, Utah
El antepenúltimo mohicano.
