5 grandes actores británicos de cine y teatro

Un 21 de mayo nos dejó John Gielgud, uno de los más grandes actores que ha dado el Reino Unido tanto en la gran pantalla como sobre las tablas escénicas. Si ya es difícil alcanzar el éxito en uno u otro ámbito, hacerlo en ambos demuestra el gran talento del que hizo gala el intérprete. Sin embargo, es bastante común en la tradición actoral británica combinar esta doble faceta. Desde SundanceTV hacemos una selección de otros 5 actores que, como él, triunfaron –o triunfan– tanto en el cine como en el teatro.

Laurence Olivier (1907-1989)

Durante décadas fue “el” actor británico por excelencia de Hollywood, pues además de talento, poseía un físico que le permitía hacer tanto de galán como de villano. A ello hay que sumarle sus dotes como realizador –sus películas Enrique V (1944), Hamlet (1948) y Ricardo III (1955) siguen siendo unas de las mejores adaptaciones de Shakespeare al celuloide– y como director y productor teatrales, donde fue codirector del Old Vic y fundador del Teatro Nacional Británico. Encarnaba una forma de interpretar extrínseca y minuciosa, alejada totalmente del Método.

Alec Guinness (1914-2000)

Aunque para muchos será siempre el caballero jedi Obi-Wan Kenobi, este polifacético actor desarrolló su carrera entre los escenarios (donde a menudo coincidió con Olivier y Gielgud) y el cine. En el teatro, además de interpretar, dirigió y adaptó varias obras, mientras que en el cine se le recuerda, sobre todo, por sus roles en las negrísimas comedias de la productora Ealing –Ocho sentencias de muerte (1949), El hombre del vestido blanco (1951) o El quinteto de la muerte (1955– y por sus trabajos a las órdenes de David Lean, como en Oliver Twist (1948), El puente sobre el río Kwai (1957) o Lawrence de Arabia (1962).

Ian McKellen (n. 1939)

Uno de los rostros imprescindibles de los escenarios clásicos ingleses, no le hace ascos a ningún tipo de propuesta que le seduzca, de forma que ha llevado a cabo desde teatro experimental hasta grandes blockbusters de Hollywood. Convertido en un icono cultural, en parte por su militancia a favor de los derechos del colectivo LGTBI, también lo es por haber encarnado a personajes tan populares como Gandalf en la trilogía de El señor de los anillos (2001-2003), o Magneto en la saga de “los X-Men”. Memorables resultan, asimismo, sus actuaciones en Ricardo III (1995) y Dioses y monstruos (1998).

Chiwetel Ejiofor (n. 1977)

Los orígenes nigerianos de los padres de este actor londinense explican que su nombre sea de difícil pronunciación para los británicos; lo que no ha sido impedimento para que debutara en el cine con tan solo 19 años, de la mano del mismísimo Spielberg, en Amistad (1997). Desde entonces, no ha parado de cosechar éxitos en los escenarios, hasta el extremo de contar, hoy en día, con la distinción de Comandante de la Orden del Imperio Británico. Entre sus papeles fílmicos destacan el magistral villano de Serenity (2005) y el sufrido protagonista de 12 años de esclavitud (2013). En 2019 ha realizado su primer largometraje como director: El niño que domó el viento.

Eddie Redmayne (n. 1982)

Alcanzó la fama en el teatro y en el cine casi de forma simultánea, gracias a sus respectivos papeles en la obra Ricardo II (montaje de 2011) y Los miserables (2012) de Tom Hooper. En 2014 ganaría un Oscar por su interpretación de Stephen Hawking en La teoría del todo (2014), para repetir nominación al año siguiente con La chica danesa. Actualmente, su rostro se ha hecho popular entre el gran público por encarnar al protagonista de la saga de “Animales fantásticos”. Recibió la Orden de Caballero en 2015.

El antepenúltimo mohicano

Park City, Utah.

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