Semifinales cinéfilas: 4 directores de los 4 semifinalistas del Mundial

Francia. Bélgica. Inglaterra. Croacia. El viejo continente parece triunfar en este Mundial. Estos cuatro países están muy cerca de convertirse en la élite futbolística en los próximos días. Pero antes, tendrán que enfrentarse entre sí para llegar a la disputada final. Con motivo de las semifinales que se celebran esta semana, destacamos a cuatro directores de cada uno de estos países que bien podrían formar parte de la alineación en el campo, siempre que cambiásemos el balón por un proyector y la red por una sábana en blanco.

Francia – Claude Lanzmann

Cuando uno de los países es Francia y hay que elegir a un director que destacar, cualquiera entenderá que no es una tarea sencilla. Que si Godard, que si Truffaut, o puede que Bresson, o mejor Varda… cualquiera de los representantes de la Nouvelle Vague podría haber protagonizado este apartado. Aunque tampoco hacía falta mirar hacia el pasado: directores actuales como Bonello, Hansen-Love o Assayas también serían buenos candidatos. Francia, festival de Cannes mediante, es la meca del cine europero, así que, ya que está difícil elegir, nos hemos tomado la libertad de rendir un pequeño homenaje a uno de los autores más importantes para entender la historia reciente del continente contada a través del cine. Claude Lanzmann, nacido en 1925 y fallecido hace apenas unos días, fue una figura destacada en la resistencia francesa contra la invasión alemana. Tras la Segunda Guerra Mundial, se licenció en literatura y filosofía y no fue hasta 1970 cuando empezó a dedicarse al cine. Sus obras, siempre con un contenido histórico, político e investigador, intentan desgranar uno de los episodios más negros de nuestra historia reciente. Su obra culmen, Shoah, es un documental de casi 10 horas de duración donde entrevista a víctimas, verdugos y testigos del holocausto nazi. Una película indispensable para el cine de no ficción que todo el mundo debería ver al menos una vez en su vida para tratar de comprender el complejo rompecabezas humano de mediados del siglo XX.

Bélgica – Los hermanos Dardenne

Jean-Pierre y Luc son dos pesos pesados dentro del cine de su país y de Europa. Con permiso del escocés Ken Loach, son quizás los que mejor han capturado la esencia de ese cine social y reivindicativo que explora las clases más desfavorecidas a través de dramas complejos emocionalmente, pero sencillos y elegantes en su narración y puesta en escena. Tienen el honor de ser de los pocos que han ganado dos Palmas de Oro: la primera en 1999 por Rosetta y la segunda en 2005 por El niño. Dos películas imprescindibles para adentrarse en los mayores exponentes del cine belga.

Inglaterra – Ben Wheatley

Ya que Inglaterra ha llegado al Mundial con una generación nueva de jugadores con ganas de cambiar la infame suerte de su selección, proponemos un nombre nuevo dentro de la siempre interesante cinematografía inglesa. Ben Wheatley debutó en 2009 con Down Terrace, una película que rodó en tan solo 8 días. Pero su reconocimiento llegó en 2012 con Turistas, donde dio rienda suelta a ese humor negro que tanto caracteriza su cine. Tras otras dos películas destacables como High Rise y Free Fire, estamos ante uno de esos directores que, si bien ya nos han dado mucho, todavía nos tienen que dar mucho más.

Croacia – Dalibor Matanic

El cine del país de la revelación de este Mundial no se ha prodigado mucho por nuestras salas, aunque ha recibido premios en festivales internacionales. Uno de los directores croatas más interesantes de la actualidad es Dalibor Matanic. Con su segunda película, Fine Dead Girls, ganó el Premio Especial del Jurado en el Festival de Sochi, pero su obra más conocida es Bajo el sol, una película en la que trata de luchar contra el odio y la intolerancia a través de tres historias de amor en distintas épocas interpretadas por los mismos actores. Un buen punto de partida para adentrarse en la cinematografía de este país balcánico.

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