5 películas favoritas para los Premios del Cine Europeo

Por primera vez, Sevilla acogerá la gala de los Premios del Cine Europeo, que se celebrará el próximo sábado, 15 de diciembre. Un estreno para la ciudad hispalense que, salvo enorme sorpresa, tendrá colores blanco y rojo –y no precisamente en homenaje al equipo de fútbol local. La cinta polaca Cold War, dirigida por Pawel Pawlikowski, es la gran favorita para dominar con tiranía unos European Film Awards poco dados a salirse del guion y que premian sin rubor la tendencia de turno. Pawlikowski, además, ya sabe lo que es ganar en el gran escenario del viejo continente. Lo hizo hace cuatro años con la sensacional Ida. De nuevo, al cineasta de Varsovia formado en Reino le faltará el aire –justo lo que le sobra a la parte superior de la imagen de sus films— para subir al proscenio de forma recurrente. Un monólogo que, por otra parte, dejará hueco a otras protagonistas que, en menor medida, tendrán su espacio en la gran noche para el cine europeo. A continuación, listamos los títulos que deberían salir victoriosos de esta 31ª edición.

Cold War, de Pawel Pawlikowski | Polonia.

Como decíamos, no se espera otra cosa: una noche tiránica de este ya clásico que cuenta una historia de amor imposible entre dos músicos que se desarrolla entre las sombras de la Guerra Fría. Los EFA a mejor película, mejor dirección, mejor actriz –impresionante Joanna Kulig— y mejor guion parecen asegurados. Falta saber si se suma al jolgorio Tomasz Kot en la categoría interpretativa masculina. Con o sin ese detalle, será la noche del cine polaco.

Girl, de Lukas Dhont | Bélgica.

La ópera prima de Lukas Dhont (de tan solo 23 años), gran revelación del pasado Festival de Cannes, se coló en la máxima categoría, aunque sus opciones se centran en el apartado Discovery, que premia el debut más estimulante del curso. Pese a la pujanza de la danesa The Guilty, no debería tener rival. Girl nos habla del tránsito de cambio de sexo de una joven adolescente que nació en el cuerpo de un chico.

The Guilty, de Gustav Möller | Dinamarca.

Otra de las grandes sorpresas del año. Este thriller desarrollado en dos espacios y en tiempo fílmico real no entró en la lucha por el EFA a mejor película de forma inmerecida pero aún guarda una última bala en la recámara: Jakob Cedergren, aspirante al galardón de mejor actor. Si alguien puede quitarle el laurel a Tomasz Kot es ese intérprete nacido en Lund y que ya fue nominado en 2010 por su labor en Submarino de Thomas Vinterberg.

La muerte de Stalin, de Armando Ianucci | Reino Unido.

Es cierto que la sección de comedia en los EFA parece un añadido poco cuidado pero es innegable que un título como este largometraje de Armando Ianucci bien merece un reconocimiento por parte de los académicos. Esta sátira sobre uno de los momentos más importantes de la historia de Europa rompe la sobriedad y seriedad de la mayoría de propuestas presentadas en esta edición. Bienvenida sea.

Un día más con vida, de Raúl de la Fuente y Damian Nenow | España.

Más difícil de predecir es la categoría de mejor película de animación. Entre la igualdad imperante destaca esta coproducción entre España y Polonia que se presentó en el Festival de Cannes y se alzó –con una puntuación increíble— con el Premio del Público en el Festival de San Sebastián. El film de Raúl de la Fuente y Damian Nenow relata la experiencia del reportero Ryszard Kapuściński en los últimos días de Angola como colonia portuguesa en 1975.

 

El antepenúltimo mohicano.

Park City, Utah.

DESCUBRE 5 PELÍCULAS DEL CINE INDIE ESPAÑOL