La música en 5 películas indispensables

La música y el cine han mantenido una estrecha relación desde que el musical El cantor de jazz (Alan Crosland, 1927) se convirtiese en el primer filme sonoro de la Historia. Durante décadas, el Séptimo Arte ha mostrado el proceso creativo, las mieles del éxito, los sinsabores del fracaso y la pasión por las canciones, a través de musicales de toda índole o biografías filmadas de estrellas de la canción o grandes compositores clásicos. A continuación, seleccionamos 5 magníficos títulos que condensan a la perfección el amor por la música en distintas facetas.

1. All That Jazz

Con una trayectoria tan escueta como curtida en el cine musical, con títulos como Noches en la ciudad (1969) o Cabaret (1972), Bob Fosse nos ofreció su obra más autobiográfica y sentida con All That Jazz (1979), basándose en sus propias experiencias como bailarín, coreógrafo y director. Roy Scheider interpretó al perfecto alter ego de Fosse, metiéndose en la piel de un director de teatro, mujeriego, obsesionado con el trabajo hasta extremos enfermizos y aquejado de una grave dolencia cardíaca, que trata de poner en marcha un espectáculo de Broadway, al mismo tiempo que prepara una película en Hollywood sobre un cómico monologuista. El filme fue unánimemente aplaudido por la crítica y se alzó con la Palma de Oro de Cannes y 4 premios Oscar, incluido el de mejor banda sonora.

2. Amadeus

Cinco años después de llevar una triunfal versión a la gran pantalla del famoso musical de Broadway Hair, Milos Forman consiguió una de sus mejores obras con Amadeus (1984), un drama biográfico que nos acercó a la rivalidad que mantuvieron Antonio Salieri (F. Murray Abraham ganó un merecido Oscar al mejor actor secundario por este papel) y un joven y locuaz Wolfgang Amadeus Mozart (Tom Hulce en el trabajo más aclamado de su carrera) en pleno siglo XVIII. Una maravillosa película, lujosamente ambientada, que supone un auténtico placer para cualquier aficionado a la música clásica. Fue un gran éxito de taquilla y se coronó como la gran triunfadora de los Oscars de aquel año, llevándose, nada más y nada menos que 8 premios, incluyendo los de mejor película y director.

3. Los Commitments

La música ha sido, desde siempre, un elemento recurrente en la filmografía del realizador Alan Parker, que conoció su primer éxito con el musical Bugsy Malone, nieto de Al Capone (1976) y volvió a repetir género en Fama (1980), El muro (1982) o Evita (1997). Pero tal vez sería Los Commitments (1991) la película más sincera (y menos famosa) con la que Parker se ha acercado a este mundo, contando la historia de un adolescente de un barrio humilde de Dublín que se propone formar una banda de música soul, por lo que organiza un casting a través de un anuncio de periódico. Una obra pequeña pero deliciosa, a medio camino entre el drama y la comedia, y con una potente banda sonora (en la que destaca el tema Mustang Sally), que muestra cómo la ilusión inicial de los integrantes del grupo da paso a los celos, las envidias y la ambición cuando la suerte profesional comienza a estar de su lado. Fue la ganadora, entre otros premios, del BAFTA a la mejor película y el de mejor director.

4. Alta fidelidad

Stephen Frears, responsable de joyas del calibre de Mi hermosa lavandería (1985) o Las amistades peligrosas (1988), sorprendió en 2000 con esta nostálgica (y muy irónica) comedia que adaptaba de manera fiel, aunque trasladando el escenario de Londres a Chicago, la novela homónima de Nick Hornby. Si hay una película que destile amor por la música en cada fotograma, cada línea de diálogo o cada maravillosa canción de los 80 o 90 de su potente banda sonora, esa es Alta fidelidad, que cuenta las tribulaciones sentimentales de un melómano dependiente de una tienda de discos vinilos, interpretado por un excepcional John Cusack. Un pequeño clásico de los 90 que fue elegido como uno de los 10 mejores filmes del año por el American Film Institute.

5. Casi famosos

Nos encontramos ante el trabajo más autobiográfico del realizador Cameron Crowe, responsable de éxitos como Un gran amor (1989) o Jerry Maguire (1996), que narra la historia de un adolescente que ejerce de reportero de la revista Rolling Stone (circunstancia que vivió el propio Crowe a esa misma edad, viajando junto a grupos como Led Zeppelin o The Eagles) para escribir sobre el mundo de la música a través de las experiencias vividas durante su viaje (físico y de iniciación a la vida) con el grupo Stillwater durante su gira por el país. Un entrañable y agridulce homenaje a la música rock de los años 70, en clave de comedia dramática, con una banda sonora espectacular, un excelente guion que fue galardonado con el Oscar en 2000, y notables actuaciones de Billy Crudup, Frances McDormand, Kate Hudson y el joven Patrick Fugit.

 

El antepenúltimo mohicano

Park City, Utah.