Las mejores películas de Josh Brolin

El 12 de febrero uno de los actores más versátiles de Hollywood cumple años. Josh Brolin, hijo de James Brolin –estrella televisiva de los 80—, hoy en día es un actor respetado y requerido por los grandes directores. Sin embargo, quién lo iba a decir, el paso a la adultez tras su éxito en Los Goonies le deparó una serie de sinsabores que le condenaron a un ostracismo que, por suerte, la industria cinematográfica estadounidense, esa devoradora de almas, acabó compensando. Gracias, en gran medida, a Joel e Ethan Coen, que le otorgaron el papel principal de No es país para viejos, una de sus grandes películas con la que cambiaron el rumbo de las carreras no solo de Brolin, sino también de Javier Bardem. A continuación, elegimos los mejores filmes del actor de Santa Mónica.

No es país para viejos (2007), de los hermanos Coen

No hay lugar a dudas. Había que empezar con la película más importante de una filmografía más exigua de lo que debería. Brolin da vida a Llewelyn Moss, un cazador que se encuentra en una batida, entre otras cosas, con dos millones de dólares en efectivo y que decide hacer suyos. Algo que, muy a su pesar, le costará una huida sin cuartel perseguido por un esbirro muy poco convencional en sus artes aniquilatorias: Anton Chigurh (Bardem). Ambos son dos personajes puramente coenianos incluidos en uno de los mejores guiones del mítico tándem.

Sicario (2015), de Denis Villeneuve

Brolin, de nuevo en el desierto, en este caso el de la frontera mexicana, interpretando a Matt Graver, un oficial de las fuerzas especiales que guiará a la protagonista del filme, Kate Macer (Emily Blunt), a una espiral de violencia y deshumanización. Para el que firma estas palabras, Sicario es la mejor película de Denis Villeneuve, todo un prodigio dentro del género de acción que cuenta con una dirección de fotografía brutal a cargo de un Roger Deakins que conseguiría su primer Oscar tres años más tarde con otra película de Villeneuve: Blade Runner 2049.

Los Goonies (1985), de Richard Donner

El comienzo de todo. Una película con la que saboreó el éxito y con la que, también, fue enterrado a nivel profesional. En este clásico juvenil de Richard Donner, uno de los símbolos de los 80, Brolin caracterizó a Brand, el «musculitos» de una pandilla de preadolescentes la cual, a través de un mapa, intentará hacer realidad lo que hasta entonces era leyenda. Pese a la caída, Brolin es el único actor de esa camada con una carrera solida treinta años después.

Puro vicio (2015), de Paul Thomas Anderson

El filme de Paul Thomas Anderson subraya el potencial de Brolin como actor secundario. En este caso, como el teniente «bigfoot» Bjornsen, dentro de ese gran carnaval angelino que presenta el director californiano en el que Brolin es pieza clave. Una de sus composiciones más complejas que subrayan el carácter de un actor que logra mimetizarse en el universo creado por los autores.

Only the Brave (2017), de Joseph Kosinski

Finalizamos con una película de menor prestigio y recorrido pero que resalta las características interpretativas de Brolin en papeles de hombre duro que esconde un lado amable. En el filme de Kosinski, claramente influido por la visión del cine patriótico de Peter Berg, interpreta a Eric Marsh, un bombero veterano que liderará una misión casi suicida —basada en un hecho real. En Only the Brave vemos a un Brolin cercano e inspirado, aceptando el rol del perfecto americano, un papel del que había huido a lo largo de su trayectoria.

El antepenúltimo mohicano

Park City, Utah.

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