La mecha se prendió y fue imparable. Estamos a finales de 2004. En Suecia se publica la novela Los hombres que no amaban a las mujeres (Män som hatar kvinnor), encuadrada en la que iba a ser una saga sin un número determinado de obras titulada Millennium. Se daba la circunstancia que días antes, su autor, Stieg Larsson, afamado escritor y columnista del país escandinavo, fallecía de un ataque al corazón con solo cincuenta años. Su impacto fue tal, que se tradujo de forma inmediata al inglés, al español, al alemán y al francés y en unos meses estaba ya dentro de la corriente de distribución europea. Su llegada a España fue un rotundo éxito: un best-seller que abrió el interés por el género y por otros autores del norte de Europa. Así arribaron a nuestro país firmas como Camille Läckberg –que superó a Larsson en interés— Jo Nesbø o Henning Mankel, pionero del nordic noir con su saga Wallander. Tras todo ello, era muy difícil encontrar una estantería de una librería que no estuviera copada por estos clásicos modernos del suspense.
De esta manera, tardó poco el audiovisual en hacerse eco de los hitos de la prosa nórdica. Un gran número de series, películas y readaptaciones estadounidenses llegaron a las pantallas. Este es el caso de Hijos de la nieve, serie que emitirá SundanceTV en el mes de marzo y que viene precedida por una gran acogida en Suecia. Para ir abriendo boca, les presentamos los títulos más representativos del género, a la altura de las novelas en las que se basan:
Los casos del Departamento Q (2013-2021)
Son cinco las películas que se han estrenado de esta franquicia: Misericordia (2013), Profanación (2014), Redención (2016), Expediente 64 (2018) y El efecto Marcus (2021). Son trabajos que no se salen del canon genérico y que podían ser considerados como capítulos autoconclusivos de un serial procedimental. Estos filmes relatan la resolución de casos de asesinato por parte de los inspectores Carl Mørck (Nikolaj Lie Kaas) y Hafez al-Assad (Fares Fares) en Copenhague. Adapta las novelas homónimas de Jussi Adler-Olsen.
Headhunters (2011)
Inesperado éxito que se aprovechó de la corriente positivista ante el género y el atractivo de uno de sus protagonistas –o antagonista en este caso—: Nikolaj Coster-Waldau, una de las estrellas de Juego de tronos. Cinta de corte comercial que narra el intento de robo de un cuadro valioso por parte de un ladrón de guante blanco (Aksel Hennie) escondido bajo el disfraz laboral de cazatalentos. Todo cambiará cuando encuentre a la horma de su zapato. El filme descubrió al público estadounidense a Morten Tyldum, que tres años más tarde dirigió la nominada al Oscar The Imitation Game. Headhunters traslada la prosa de Jo Nesbø.
Los hombres que no amaban a las mujeres (2009)
Como era lógico, Stieg Larsson tenía que estar presente. La traslación de su novela más famosa al celuloide fue tan popular como el texto. Unos soberbios Michael Nyqvist y Noomi Rapace dan vida a una periodista y a una hacker, respectivamente, que se unirán casi por accidente para encontrar a la hija desaparecida de un magnate. El largo dirigido por Niels Arden Oplev tiene en el diseño de atmósfera su gran valor; una estética que marcó el devenir del subgénero en la siguiente década. David Fincher se encargó de su meritorio remake estadounidense, con Daniel Craig y Rooney Mara, pero la franquicia no prosperó.
Uno tras otro (2014)
La cinta de Hans Petter Moland, que compitió por el Oso de Oro de la Berlinale en 2014, no tiene una base literaria pero sí comparte elementos y estilemas de la corriente. Eso sí, con un estilo y narrativas propios, ya que en esta historia de venganza hay espacio para la violencia pero también para el sarcasmo. Stellan Skarsgård es el encargado de encarnar a este padre coraje que buscará alivio tras la muerte de su primogénito. La estrella del show, sin embargo, es el villano interpretado por Pål Sverre Hagen. Como la película anterior, tuvo su remake, Venganza bajo cero (2019), dirigida por el propio Moland y protagonizada por un clásico en la materia: Liam Neeson.
@eamcinema | Park City, Utah.
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